Vida Profesional vs Vida Sentimental

TODOS nosotros sabemos que la vida consta de ciertos patrones.

Estudiar: Para conseguir un buen trabajo hay que cultivar nuestra educación. Desarrollar habilidades y tener una vida PROFESIONAL que nos retribuya lo necesario para vivir: ya sea. Comer, vestirnos, diversión, etc. Si algo hemos aprendido desde niños, es que el desarrollar nuestras habilidades es importante. Por ende queda entendido esta seria la primera necesidad. “DESARROLLAR NUESTRAS HABILIDADES.”

Amar: La irremediable batalla que más de alguno de nosotros ha tenido ya. Pero no se habla de amar a tus padres o a tus hermanos. - NO - Hablamos de amar a un semejante, alguien que pueda estar contigo cuando los demás te falten. Buscar un compañero de vida. Esa es la otra constante.

Entonces, ¿qué pasa cuando ambas constantes no pueden estar en la misma ecuación?

Por otro lado, otra cosa a la que nos hemos acostumbrado: “La toma de una decisión” Que si tomas alcohol o no - sabiendo que podrían hacerte la prueba del alcoholímetro. Sí creer en Dios, o en la teoría de la evolución. Que si blanco o negro. A final de cuentas uno decide lo que quiere.

Pero ¿Qué pasa cuando uno quiere dos cosas que se contradicen? ¿Cómo elegir entre dos cosas por las que has peleado toda tu vida?

Como profesionista: que se tiene un currículum lleno de experiencia, cursos y estudios, se realizan esfuerzos inhumanos para llegar a lo que se es en ese momento. – por fin saber que, después de todo ese trabajo, tendrás el mejor puesto en una buena empresa donde te desarrollaras como profesionista y aprenderás del campo laboral, pudiendo tener la opción de poder darte los gustos por los cuales has hecho todo ese trabajo.

Aquí es donde te das cuenta que has llegado al punto en tu vida donde has obtenido más de lo que esperabas y sabes qué serás feliz con ello, si así decides hacerlo. O si realmente es lo que esperabas.

Sin embargo: sabes que esta decisión implica tomar otras aunadas a ella. Como dejar a la persona que amas. Otra de las cosas por las que tanto peleaste. El amor, es tan difícil de encontrar, de establecerse. Saber que tomo tiempo estabilizarte con ese alguien al que ahora amas, con el que tal vez vives, duermes, ríes, con quien compartes sueños, ese alguien que sabe lo que deseas, que haría lo que tú por él.

Sería demasiado egoísta de tu parte obligarlo a vivir parte de tú sueño cuando probablemente él ya está viviendo parte del suyo, (hablando de la parte laboral). Que él tendría que comenzar a decidir cosas. Como ¿que dejar por irse contigo? O que tal vez a pesar de que así como para ti, él es AMOR y tú lo eres para él, no puedes pedirle que deje todo por ti, cuando tú no estás dejando nada para él.

E ahí cuando llega el momento de decidir. Poner en la balanza y averiguar cual constante tiene más peso - siendo que las dos son parte indispensable de la vida. Lo importante aquí es saber que lo que la decisión genere. Tomando en cuenta que la decisión tomada es un punto que cruza de manera perpendicular a tu línea y la hace cambiar de dirección.

Al final siempre se trata de decisiones, cualquiera que tomes afectara a la otra de manera circunstancial, de manera positiva o negativa, el resto de tu vida. Así definimos nuestra ecuación. DECIDIR.